Si querías crear una agencia de marketing hace más de 25 años, la barrera de entrada era colosal. Con un panorama digital primitivo, los gastos generales para crear una operación de este tipo eran desalentadores y casi imposibles sin una inversión inicial. Además de los costes de puesta en marcha, uno se veía limitado a los medios físicos y tradicionales y a los dolores de cabeza asociados a la fabricación de algo que se pareciera al retorno de la inversión para sus clientes. Estar «en números rojos» durante mucho, mucho tiempo era inevitable.
No es imposible pensar que una persona capacitada o un pequeño equipo pueda crear una agencia de marketing totalmente operativa desde cero en pocos meses (con un poco de ayuda, por supuesto).
Las empresas están gastando más que nunca sus presupuestos de marketing en publicidad digital, y todo el mundo quiere una parte de la acción. En esta guía de Agencia digital Royal te daremos algunos consejos que debes seguir si quieres construir una agencia de marketing online:
Desarrollar las habilidades necesarias
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Puedes ser tan creativo e inteligente como cualquiera en el juego, pero si no estás preparado y no tienes la experiencia suficiente para lidiar con los muchos matices de la gestión de las cuentas y las relaciones con los clientes, estarás buscando otro trabajo muy rápido. Algunos pueden tardar años en adquirir las habilidades necesarias, otros pueden tardar menos. En cualquier caso, creo que es necesario mantener un trabajo real durante algún tiempo antes de aventurarse por su cuenta.
Los entornos de trabajo son mucho más complejos de lo que nos damos cuenta mientras nos afanamos en ellos. Por encima del trabajo real que produces hay una multitud de expectativas, gimnasia de comunicación verbal y no verbal, y política. Todo, desde la estructura de la organización hasta su cultura, producto y liderazgo, influye en el desarrollo de tu día a día (y de tu carrera).
Antes de dominar tus habilidades de marketing digital, tienes que experimentar cómo es el trabajo donde tus clientes pueden trabajar. Esto te convertirá inevitablemente en un profesional más comprensivo y completo. Cuando tus clientes estén estresados y posiblemente lo proyecten en ti, no te lo vas a tomar como algo personal.
Dicho esto, es importante entender que las habilidades blandas son sólo el 50% del producto final que eres tú. Tienes que ser bueno en lo que vas a ofrecer como servicios «profesionales». No importa lo hábil que sea tu juego de ventas, un cliente descubrirá tarde o temprano que le han vendido aceite de serpiente.
Tienes que ser capaz de obtener resultados. Si empiezas tu carrera gestionando clientes para agencias más grandes, te animo a que empieces a trabajar en un equipo de marketing o que cojas un puñado de clientes pequeños para aprender los canales y las habilidades que vas a ejecutar.
Esto implica, pero no se limita a:
- Construir páginas de aterrizaje
- Diseñar anuncios
- Construir la mensajería y el posicionamiento
- Implementar correctamente el seguimiento
- Pasar horas en una promoción sólo para ver cómo fracasa
Ser un contratista antes de convertirse en un fundador
Tener un trabajo que te pague y te permita operarte el cerebro sin una deuda de por vida es un lujo que muchos damos por sentado. Dar el salto de trabajar por cuenta propia tiene una lista de riesgos tan larga que podría dar para una entrada de blog aparte. Lo que mitiga gran parte de ese riesgo es desarrollar las bases de un negocio antes de tomar la decisión de hacerlo a tiempo completo.
